Cómo aplicar el colorete
El colorete, también conocido como «blush», aporta frescura a la tez en un abrir y cerrar de ojos y evoca un color sutil en el rostro. Incluso las pieles cetrinas adquieren inmediatamente un aspecto más vivo y juvenil. Te mostramos cómo aplicar el colorete para acentuar los rasgos de tu rostro.
Instrucciones
¿Qué color de colorete me quedaría mejor?
El colorete que te apliques es crucial para obtener el mejor resultado. Dependiendo del tono, puedes aportar calidez a tu tez y crear una sinergia con el resto de tu look de maquillaje.
Pieles claras: los colores suaves como el rosa, el palo de rosa, el malva, pero también los tonos melocotón aportan más frescura.
Pieles medias: puedes usar colores un poco más intensos y llamativos, como los tonos baya, coral o naranja óxido.
Pieles más oscuras: varios tonos cálidos como el naranja intenso, el albaricoque e incluso el rojo harán que tu cutis brille.
Aplicar el colorete según la forma del rostro
El lugar de aplicación del colorete también varía en función de la forma de tu rostro. Cuanto más cerca del centro del rostro se aplique el colorete, más relleno parecerá el rostro. Imagina una línea trazada en el centro del ojo. Esta define la profundidad exacta. Si aplicas el colorete más lejos de la línea, tu rostro parecerá más estrecho e incluso visualmente más elevado.
Aplicar el colorete correctamente
Empieza por el lado del pómulo con un brocha biselada. Empieza a aplicar el color de dentro hacia fuera, difuminándolo hacia las sienes y las líneas del cabello. También puedes aplicar el colorete sobre los ojos para conseguir un aspecto más armonioso y juvenil.